Hoy en día, la comodidad de pedir un taxi o utilizar una aplicación de transporte es innegable. Sin embargo, esta comodidad puede tener un alto costo cuando no está bien planificada, dañando el presupuesto y comprometiendo otras prioridades financieras. Para muchas personas, dejar de gastar en taxis parece un desafío imposible, especialmente si el transporte público no es una opción viable o si existe la necesidad de un transporte rápido y seguro. Pero la buena noticia es que existen estrategias sencillas que pueden ayudarle a reducir estos costos significativamente. En este artículo exploraremos consejos infalibles para dejar de gastar en taxis y, además, ¡ahorrar mucho más en tu día a día!
1. Planifique sus viajes con anticipación
El primer paso para dejar de gastar en taxis es la planificación. Solemos utilizar este tipo de servicios en momentos de prisa o cuando no planificamos nuestros viajes. Para evitar esta trampa, intenta organizar tu rutina y tus citas con antelación. Por ejemplo, si sueles ir a trabajar a la misma hora todos los días, busca alternativas que puedan sustituir el uso de un taxi. Crear un calendario semanal, marcando las rutas más habituales y sus alternativas de transporte (como autobús, metro, coche compartido o incluso bicicletas), ayuda a identificar los mejores horarios y modos de viaje, evitando gastos innecesarios en servicios de transporte individuales.
Además, intenta combinar tus viajes siempre que sea posible. Si necesitas resolver varias cosas en un mismo día, intenta agrupar estas tareas en un solo viaje, reduciendo el número de viajes y, en consecuencia, los costes de taxi. Planificar tus salidas y rutas ayuda no sólo a reducir el uso de taxis, sino también a optimizar tu tiempo.
2. Utilice aplicaciones de movilidad compartida
Si eliminar por completo el uso de taxis no es una opción para usted, entonces reducir el costo de los viajes es un excelente comienzo. Para ello, utilice aplicaciones de movilidad compartida. Opciones como Piscina Uber y el 99Compartir te permiten compartir el coste de la carrera con otras personas que se dirigen a destinos cercanos. De esta manera, pagas una fracción de la cantidad que pagarías por una carrera individual.
Además de ser más económicas, estas modalidades también ayudan a reducir el número de coches en las calles, contribuyendo a un tráfico más fluido y menos contaminante. Pero es importante planificar con antelación, ya que estos trayectos suelen tardar un poco más debido a las paradas para recoger y dejar a otros pasajeros.
Otra alternativa es utilizar servicios de coche compartido, como Blablacar, que conectan a personas que van al mismo destino y quieren compartir costos de transporte. Dependiendo de la ruta y la disponibilidad de tiempo, puede resultar una solución más económica e interesante que el uso frecuente de taxis.
3. Adoptar el uso del transporte público y alternativo
Puede parecer un consejo obvio, pero utilizar más el transporte público es una de las formas más eficientes de dejar de gastar en taxis. Dependiendo de tu ciudad, los autobuses, el metro y los trenes ofrecen buenas alternativas para la mayoría de los viajes cotidianos. Para que el uso de estos medios de transporte sea más práctico, infórmate siempre de las horas punta y de las líneas más rápidas para tu ruta.
Otro punto a considerar es el transporte alternativo, como bicicletas y patinetes eléctricos. En muchos centros urbanos, servicios como Bicicleta Itaú, Amarillo y Largarse Ofrecen precios asequibles y la ventaja de ser más ágiles en tramos cortos. Si vives en una ciudad con carriles bici seguros, ¿por qué no pruebas la bicicleta para desplazarte más rápido?
4. Elija caminar distancias cortas
¿Sabías que la mayoría de la gente utiliza taxis incluso para recorrer distancias cortas? En lugar de gastar dinero en estos cortos tramos, ¿qué tal optar por dar un paseo? Además de ser más saludable, caminar también es una forma de reducir el ritmo y observar mejor la ciudad que te rodea.
A menudo utilizamos taxis por costumbre, incluso cuando la distancia es corta. Antes de solicitar un viaje, plantéate la siguiente pregunta: “¿Realmente es necesario coger un taxi ahora mismo?” Si la respuesta es “no”, átate las zapatillas y sigue a pie. Con el tiempo, te darás cuenta de que la mayoría de los viajes cortos se pueden completar fácilmente caminando, y esto se traduce en importantes ahorros durante todo el mes.
5. Controle sus gastos y establezca límites
Finalmente, para dejar de gastar realmente en taxis, es necesario tener control sobre sus hábitos de gasto. Una buena práctica es controlar cuánto gastas al mes en taxis y transporte en general. Aplicaciones como Móviles, GuíaBolso y Mis finanzas le permite registrar todos los gastos y categorizarlos fácilmente, ayudándole a visualizar a dónde va su dinero.
Después de realizar un seguimiento de sus gastos durante algunas semanas, establezca un límite mensual para este tipo de gasto. Si te das cuenta de que te estás acercando al límite, busca alternativas para viajes posteriores, como compartir coche con amigos, transporte público o incluso optar por no realizar el viaje si no es urgente.
Tener un presupuesto específico y respetarlo ayuda a crear comportamientos más conscientes respecto al uso de taxis y transportes de pago, evitando que los costes se salgan de control.
Conclusión:
Dejar de gastar en taxis requiere disciplina y cambiar hábitos, pero los beneficios para tu bolsillo son enormes. Planificar tus viajes, utilizar transporte compartido, explorar opciones alternativas y controlar tus gastos son pasos esenciales para reducir este tipo de gastos. Con un poco de esfuerzo verás que es posible moverte de manera eficiente sin comprometer tu presupuesto. ¡Pon en práctica estos infalibles consejos y empieza a disfrutar de un día a día con más ahorros y menos estrés financiero!